Las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) son un eje transversal en las actividades de los seres humanos, así también permiten actuar de manera oportuna ante amenazas naturales y riesgos generados por el ser humano, minimizando los efectos adversos que estos pueden ocasionar durante situaciones de emergencia, facilitando la adopción de mejores decisiones para salvar vidas.
En este contexto, el Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Sociedad de la Información (MINTEL), trabaja en la implementación de Sistemas de Alerta Temprana como alternativa de previsión ante la presencia de desastres ocasionados por fenómenos de origen natural, usando diversas tecnologías que faciliten la mitigación de los mismos y permitan atender a la población de manera oportuna.
En este sentido, el MINTEL recibió una donación de equipamiento tecnológico por parte del Gobierno de Japón para realizar prototipos que permitan el desarrollo de soluciones Sistemas de Alerta Temprana, en colaboración con la academia y el sector público.
Así mismo, las telecomunicaciones cumplen un rol fundamental para facilitar el proceso de rehabilitación y reconstrucción, que se conoce como la fase de resiliencia, permitiendo que las personas recuperen las comunicaciones y traten de volver a una normalidad después de los eventos que se produzcan.
Durante el período 2010 al 2020, las amenazas naturales y riesgos antrópicos que afectaron al Ecuador con mayor frecuencia fueron: terremotos, protestas sociales, socavamientos, sismos, inundaciones, erupciones volcánicas e incendios forestales.
Un ejemplo de los eventos fue el terremoto del 16 de abril del 2016, que dejó 663 personas fallecidas, 6274 personas heridas, 113 personas rescatadas con vida, y cerca de 30.000 personas albergadas. Esto produjo además, una afectación económica al sector de las telecomunicaciones de 86 millones de dólares.
Otro ejemplo sobre las telecomunicaciones en eventos de emergencia es las protestas sociales de octubre de 2019, que mantuvieron en zozobra a la ciudadanía, por un lapso de 10 días, cortándose las comunicaciones en algunas localidades del país, produciendo pérdidas económicas y productivas.
Así durante la pandemia generada por el COVID-19, se evidencio el rol fundamental de las TIC al permitir que se desarrollen acciones en beneficio de los ciudadanos como: la telemedicina, el teletrabajo, la educación virtual. Además, el Gobierno garantizó que no se cortarán los servicios de telecomunicaciones, durante los meses que duró la emergencia nacional.